En general ocurre que las parcelas tienen tres superficies distintas: una en la Escritura, otra en el Catastro y otra la superficie real de la parcela en el terreno, esta es la superficie que debería reflejar la Escritura y el Catastro. En algunos casos tiene una cuarta superficie, cuando no coincide la superficie del Catastro y la superficie del Registro de la Propiedad.

Problemas

Hay problemas que surgen a la hora de comprar o vender. ¿Vendo menos m2 de los que realmente tengo? ¿Estoy comprando menos m2 de los que pago? Cuando se quiere edificar el proyecto tiene que tener la superficie real, la cual no coincide con la catastral del ayuntamiento, y por lo tanto no me dan la licencia hasta solucionarlo. Más problemas: al dividir la parcela, con las herencias, invasión del colindante, en las expropiaciones, y en resumen, en cualquier situación que tengan que ver con los linderos de la parcela.

La solución

La solución es la medición de la parcela en el terreno por un técnico competente en la materia, o lo que es igual, por un ingeniero técnico en topografía, el cual realizará las medidas en campo con los métodos e instrumentos adecuados para obtener con precisión la superficie real de la parcela. Además le entregará un plano detallado de la parcela a escala, con los datos de la parcela y un informe técnico del trabajo realizado. Este trabajo topográfico le sirve para evitar todos los problemas citados anteriormente.